Foro abierto

Un nuevo peligro para México

Javier Orozco Alvarado
A veces, quienes nos dedicamos a escribir sobre los diversos temas que atañen a la nación o a la humanidad, quisiéramos abstenernos de socializar nuestras propias percepciones u opiniones personales. Es incómodo y complicado, no porque no debamos tener nuestras preferencias por los partidos o por los candidatos que entran en la contienda, sino porque ello se interpreta como una inclinación ideológica, política o personal.
La realidad es que es la gente quien tiene que tomar sus decisiones a partir del acceso a la información, de sus propias simpatías, sus preferencias o sus criterios muy individuales. Nuestra tarea como comunicadores es tratar de que la gente razone y reflexione sobre las ventajas de preferir una opción u otra, sobre las ventajas o las consecuencias de sus probables decisiones y sobre las opciones o alternativas que tiene entre sus manos para decidir su futuro.
En México nos encaminamos a algo así como  lo que recientemente acaba de suceder en las elecciones de los Estados Unidos; elegir como presidente a un patán o a una diplomática, a un neoproteccionista o a una librecambista, a alguien con experiencia empresarial o a alguien con experiencia política, a alguien del sistema o de fuera del sistema.
Pero como afirma la Public Choice School, son las masas quienes deciden la elección a partir de sus simpatías por el más gracioso, el más guapo, el más tirano, el más alto, el más bajito, el mejor vestido, el mejor orador y, no pocas veces, hasta por el más ignorante.
Hoy el verdadero peligro para México en el 2018, no es Andrés Manuel López Obrador, como lo señaló durante su campaña el expresidente Felipe Calderón; el verdadero peligro es el retorno de Calderón a la presidencia en la personificación de Margarita Zavala. Y conste que no simpatizo con su candidatura, no porque sea mujer, sino porque representa el retorno del PAN.  El peligro es volver a tener en el gobierno a un partido que en doce años destruyó lo que el viejo PRI construyó en más de setenta años.
Tampoco quiere decir que esté a favor del nuevo PRI, y menos a favor de la nueva generación de priistas como Javier Duarte, Cesar Duarte, Roberto Borge, Rodrigo Medina, Fausto Vallejo o Humberto Moreira, acusados de vínculos con la delincuencia organizada, peculado, lavado de dinero, defraudación fiscal, desvío de recursos públicos, ejercicio indebido del servicio público, etc., etcétera.
Pero el verdadero peligro para México es Margarita Zavala por formar parte de las familias más corruptas del país, por ser la esposa de Calderón, otro de los peores presidentes de nuestro país; que enfrentó a todo el pueblo a una guerra contra el narcotráfico, lo que arrojó más de setenta mil desaparecidos e innumerables víctimas sin haber sido juzgadas. El peligro es volver al calderonismo, al foxismo o al panismo.
La historia debe servir para no cometer los mismos errores ni tropezar con la misma piedra. Así lo demostró el joven que pidió retratarse con Margarita Zavala en la FIL, durante la presentación de su libro “Margarita, mi historia”; en donde aprovechó para exhibir una cartulina que decía: “Su esposo le arrebató la vida a mi padre. ¿Usted quiere arrebatármela a mí?”
Espero que este país un día despierte, que recapacite y deje de lado sus ideologías, su filias y sus fobias; que piense en su futuro, no en las promesas que repetidamente exponen una y otra vez los mismos políticos bajo distinto partido o bajo distintos colores.
No porque Margarita sea mujer será buena o mala presidenta; simplemente será la personificación del PAN, sin más talento que el que no tuvo su esposo. Por eso preocupa, porque en las últimas encuestas realizadas por el periódico El Financiero muestra que la posible candidata del PAN a la presidencia de la república ocupa el segundo lugar en las preferencias con el 21%; muy cerca del 25% de preferencias por Andrés Manuel López Obrador.
Aunque Miguel Ángel Osorio Chong le pisa los talones a Margarita con el 19% de las preferencias, es probable que en la recta final pueda llegar a emparejarlas o, inclusive, superar a sus dos contrincantes punteros. Quienes sí están por los suelos son Miguel Ángel Mancera con el 8% y los académicos Denis Dresser y Jorge Castañeda con el 4% y 2%, respectivamente.
En fin, ojalá y Margarita Zavala tuviera la talla de mujeres tan brillantes como la periodista Carmen Aristegui, la académica Denis Dresser o la experimentada política Beatríz Paredes; ahí estaríamos hablando de mujeres candidatas que destacan por sus méritos y no por ser la esposa de un expresidente.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba